Lo que Usted Decide Hoy Será Su Mañana

La importancia de hacer decisiones apropiadas está ilustrada en las vidas de los hijos de Israel en Cades Barnea. Ellos estaban a punto de entrar a la tierra prometida y conquistar solo una decisión los separaba de la Victoria(Números 13:8-23; 14:1-23). Al acercarse el momento en que se requería una decisión crucial, comenzaron a dudar. Hay factores que influencian para tomar la decisión equivocada y siempre se paga un precio muy grande por el error.

1. Las circunstancias influyen grandemente en que se tomen decisiones equivocadas.

a. Las ciudades fortificadas y los gigantes le dieron al pueblo de Dios el complejo de “langostas”. Se sentían pequeños, insignificantes, sin poder y frustrados. ¿Por qué? Porque miraron a Dios a la luz de sus circunstancias en lugar de ver las grandes posibilidades. Fueron influenciados más por el tamaño de los hombres que por el tamaño de Dios. (Números 13:28,33)

b. Cometieron un error drástico al tratar de manejar los problemas del mañana junto con los de hoy. No era la dificultad del hoy que influenció para la decisión incorrecta, sino los problemas anticipados del mañana que les trajeron la derrota. ¡Cuán cierto es esto en nuestras vidas también! ¿Cuántas veces una decisión equivocada ha sido el resultado de traer las dificultades imaginarias del mañana a la situación de hoy? La carga se vuelve asombrosa. Las respuestas negativas comienzan a salirse completamente fuera de proporción. Se produce el pánico, y se toman decisiones equivocadas, decisiones que determinan nuestro destino.

2. La influencia negativa impide experimentarla bendición de Dios.

La influencia negativa de los diez espías impidió a los hijos de Dios experimentar lo mejor para sus vidas. Hubo diez hombres que dijeron: “No se puede hacer”; hubo otros dos hombres que dijeron: “Estoy seguro de que podremos hacerlo” (13:30. BAD)

Diez hombres que impidieron a miles de personas encontrar la perfecta voluntad de Dios para ellos. Diez hombres fueron más obstáculo a los hijos de Israel que diez ciudades fortificadas del tamaño de Jericó. Los enemigos del pueblo de Dios no fueron hititas, los amalecitas o los jebuseos. Los enemigos de Dios fueron diez hombres que dijeron, “No podemos hacerlo; no hay forma de obtener la victoria”.

3. La falta de voluntad de pagar el precio es otro factor que influye para tomar una decisión equivocada.
En cada gran tarea debe pagarse un precio. Cuanto más grandiosa la causa, mayor es el costo. Los hombres y mujeres que han logrado mucho han sacrificado mucho. No damos nada, nada recibimos. No se llora, no se cosecha. No hay duda que el precio a pagar por entrar a Canaán pesaba grandemente sobre la mente de cada persona. Si entraban a Canaán, su seguridad iba a estar amenazada.

Pensaban que la seguridad era no tener que confrontar las batallas de la vida. La única seguridad para el creyente no se encuentra en evitar las batallas, tentaciones y problemas, sino en estar en la perfecta voluntad de Dios. El líder enfrenta las circunstancias , los pensamientos negativos y tiene voluntad de pagar el precio.

Comentarios

Entradas populares